miércoles, 27 de agosto de 2008

A Primera hora…

Desayuno sobre tu piel, encuentro el alimento perfecto
asistente directo del caparazón con alas ocultas,
en la tierra de tus zapatillas las huellas
tu dolor de mares lejanos y cruceros que no zarpan,
mejor estar despierto para que no se escape un segundo
en tu lado tibio las cosas, no se puede ver tu corazón
brota por todos lados parte de tu Sangre
sí, no, todo depende de lo que pase con tu sangre
y la de mil poetas que han muerto por ordenar palabras
más, menos, estoy cansado de las palabras
no sé qué caballo salvaje disfruta de tanto cabalgar
juntos, pero qué lejos que está ahora el chico que me gustaba
tenía doce sentados a la mesa creando el alimento de millones
dijeron que volverían a ser viento y no se supo nunca
por qué pero se fueron con valijas marca adidas.
Habría que tomarse un tren o tomarse una aspirina dulce
Cubres mis días con tu sonrisa monumental,
Gana river dos a cero. Qué grande.
Soy de boca y no me importa.
Al fin y al cabo somos siempre lo mismo. No tiene ninguna importancia.
Es tiempo de dejar de desayunar

Meliza Ortiz
Ariel Posse Varela

13 de Junio del 2008.-

1 comentario:

M. dijo...

Hola Ariel!
Ahí dejé mi versión del cadáver exquisito online (ja!) en las Galletitas. Después fijate.
:-)
Me parece muy buena la iniciativa de este blog!
Un beso!

Meliza